Cómo usar el cubrebocas
Teotihuacán en Línea. Epidemiólogos del
Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) hicieron un llamado a la sociedad
sobre la importancia del uso correcto de cubrebocas, el cual debe cubrir nariz
y boca para evitar contagios por enfermedades respiratorias.
“Si sólo se cubre la boca, los microorganismos
que se quedan en la parte externa del cubrebocas se van a respirar por la nariz
y eso provoca que la persona se enferme”, explicó la doctora Paola Johana
Hernández Rodríguez, coordinadora auxiliar de vigilancia epidemiológica de la
Oficina de Representación del IMSS Ciudad de México Norte.
La especialista mencionó que los diferentes
tipos de cubrebocas evitan que las personas en nuestro entorno se puedan
contagiar, además de protegernos a nosotros mismos. “Los hay estándar, bifásico
de uso quirúrgico o de cirujano, y trifásico como las mascarillas de alta
eficacia”.
Precisó que un cubrebocas estándar es de uso
común y ante la emergencia sanitaria por COVID-19 todas las personas lo pueden
utilizar. “Éste lo que hace es proteger en un 70 por ciento que la persona
enferma no transmita la enfermedad ni permita la salida de secreciones”.
“Si yo, persona enferma, no utilizo cubrebocas
y tú, persona sana, sí haces uso del mismo, la eficiencia baja hasta un 20 por
ciento. Y si ambas personas, enferma y sana, usan cubrebocas esa efectividad
aumenta hasta en un 80 por ciento de protección”, aseveró.
La doctora Paola Johana Hernández Rodríguez
indicó que el cubrebocas trifásico es el que tiene pliegues y un alambre que se
amolda a la forma de la nariz y al rostro, y por consiguiente brinda mayor
seguridad.
Agregó que los cubrebocas de alta eficiencia,
mejor conocidos como mascarillas N95 o KN95, tienen hasta un 98 por ciento de
seguridad donde ninguna partícula menor a cinco micras de espesor va a tener
contacto con las vías aéreas.
“El mito que se tiene que eliminar es que los
cubrebocas hechos en casa no sirven, ya que no pasan por una certificación de
calidad como los de grado quirúrgico hechos con una tela especial donde no
pueden filtrarse partículas con dimensiones mayores a cinco micras”, precisó la
epidemióloga.
“Si vamos a utilizar el cubrebocas debemos
hacerlo bien y estar conscientes que tenemos un objeto en la cara para
protegernos. Entonces no lo podemos tocar, debemos utilizarlo cubriendo nariz y
boca, de preferencia que esté lo más adherido a la estructura de nuestra cara y
no tenga espacios de salidas de aire.
En el caso de las mascarillas de alta
eficiencia, éstas son para quienes realizan procedimientos médicos, intubando o
aspirando secreciones de un paciente o en salas donde hay alta concentración de
personas con enfermedades respiratorias como COVID-19 o influenza.
Hernández Rodríguez explicó que es muy
importante el retiro y colocación de ambos tipos de mascarillas, hay que
lavarse las manos con agua y jabón antes de colocarlos y después de retirarlos,
si no es posible, se pueden utilizar soluciones alcoholadas.
Mencionó que la duración de las mascarillas
N95 y KN95 tienen un periodo de vida de uso continuo máximo de 24 horas, pero
la recomendación es utilizarla por periodos no mayores a 12 horas.
Si se utiliza de forma intermitente, por un
par de horas y se retira, se puede alargar su periodo de vida de 48 a 72 horas. Es posible reutilizarla
pero hay formas de resguardarla, lo ideal es meterlas en bolsas de papel, nunca
de plástico porque generan humedad, ponerlas en áreas donde no les caiga nada
encima para que no pierdan su forma original, dijo.
Si llegan a arrugarse o pierden su característica
de inicio, también hay que desecharla. Tampoco es recomendable ponerles alcohol
ni alguna sustancia para eliminar microorganismos porque se humedecen y en ese
momento pierden la efectividad, comentó.
La doctora Hernández Rodríguez indicó que el
momento ideal para utilizar los cubrebocas estándar es cuando vamos a estar en
lugares con alta concentración de personas, por ejemplo en el transporte
público.
En áreas pequeñas con cinco o hasta 10
personas donde no se puede guardar una sana distancia, sí es necesario su uso;
pero si el espacio permite mantener más de 1.80 metros se puede
prescindir del mismo, refirió